Entrevista a Luisa González, excandidata presidencial por Revolución Ciudadana en Ecuador.
La crisis política que atraviesa Ecuador desde las elecciones presidenciales de 2025 ha desencadenado un profundo debate nacional e internacional sobre la legitimidad democrática, el papel de las instituciones electorales y el retorno del progresismo liderado por la Revolución Ciudadana (RC).
En el centro de esta tormenta política se encuentra el polémico ascenso al poder de Daniel Noboa, marcado por denuncias de fraude electoral que no han dejado de crecer, y el fortalecimiento de la figura de Luisa González y su movimiento, que reclama un proceso limpio y transparente.
Con ella hablamos en Horizonte Multipolar sobre la situación política en Ecuador, así como de los procesos de persecución política que se han dado a lo largo de América Latina.
En este marco, «en Ecuador asistimos a un fraude institucional, porque la democracia está en disputa, y lo que nos ocurrió a nosotros puede ocurrir en otros sitios», aseveró la excandidata presidencial.
Diversos informes independientes y denuncias ciudadanas han cuestionado seriamente los resultados electorales que dieron por ganador a Noboa por un estrecho margen frente a Luisa González. Irregularidades en el conteo rápido, actas con inconsistencias evidentes, fallos sistemáticos del sistema informático del CNE y denuncias de coacción electoral en varias provincias han generado una ola de indignación.
La ausencia de una auditoría exhaustiva y la negativa de las autoridades electorales a recontar los votos han profundizado la desconfianza pública. Incluso observadores internacionales, aunque diplomáticamente cautos, han señalado “deficiencias importantes en la transparencia del proceso”.
En este marco, «Noboa hizo una campaña sucia, en la que utilizaron dinero del Estado para contratar a alguien que trató de atacarme a nivel personal», sostuvo.
En lo que refiere a la política latinoamericana, «cuando en la región intentamos unirnos, se observan criterios divergentes a la unidad, lo cual tiene que ver con una estrategia geopolítica de EEUU«, indicó.
En este sentido, «yo creo que Latinoamérica está enfrentando un Plan Condor del Siglo XXI, a través del cual en aquellos países con movimientos progresistas, se usa a la Justicia para perseguir y condenar, al margen de la ley, a quienes pueden llegar a ser presidentes o han sido personas influyentes», sentenció.
Ello «ha pasado con Evo en Bolivia, Lula en Brasil, Cristina en Argentina y ahora con Petro en Colombia», concluyó.
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