El integrante uruguayo de la Internacional Antifascista, Gerardo Suárez, alertó sobre un escenario geopolítico “muy riesgoso”, marcado por la disputa entre el viejo orden dominado por Estados Unidos y la emergencia de un mundo multipolar. En diálogo con este medio, Suárez sostuvo que el imperialismo “se resiste a caer” y que la región latinoamericana enfrenta una posible escalada bélica impulsada desde Washington.
“Estamos ante una situación muy riesgosa. El contexto mundial y el momento histórico indican que la humanidad está transitando a un mundo multipolar, en el que el eje EEUU-OTAN dejará de ser el amo y señor de los pueblos del mundo. Este hecho, sumamente beneficioso para los pueblos del Sur Global, trae consigo la agresividad del imperio que se resiste a caer”, afirmó.
Según Suárez, las recientes acciones militares y diplomáticas de Estados Unidos en el Caribe deben leerse en ese marco. “La violencia e ilegalidad con la que EEUU actúa hoy en día en el Caribe se enmarca en esta situación histórica. Las agresiones militares, invasiones y golpes de Estado promovidos por el imperialismo en nuestro continente, han sido una constante en los últimos cien años. Lo nuevo de esta situación es que directamente están planteando comenzar una guerra en nuestro continente”, advirtió.
El militante recordó que las estrategias de intervención estadounidenses no son nuevas y remiten a los Documentos de Santa Fé, elaborados por la CIA en los años ochenta.
“Lo que EEUU aplica en Venezuela es lo que describen, al pie de la letra, los Documentos de Santa Fé elaborados por la CIA en la década de los 80. Estos documentos, presentados al presidente Richard Reagan, son un manual de acción para evitar gobiernos soberanos en nuestro continente. En uno de sus puntos dice textualmente: ‘usar la lucha contra el narcotráfico para fortalecer la presencia militar norteamericana y financiar a grupos paramilitares’. Es un manual de intervención, violencia y cambio de gobierno.”
Suárez agregó que esos lineamientos fueron actualizados en el año 2000 para frenar el proceso político iniciado por Hugo Chávez. “En el año 2.000 estos documentos fueron actualizados específicamente para contener el proyecto político de Hugo Chávez en la región. Nadie puede hacerse el distraído. Lo que se aplica a Venezuela desde hace 26 años y que hoy en día se ha intensificado, es un manual de intervención norteamericana.”
En ese sentido, vinculó el programa de la dirigente opositora María Corina Machado con los intereses de Washington:
“El proyecto político de María Corina Machado es la parte final de este manual golpista: ‘instalación de gobiernos próximos a los EEUU con poca capacidad de gestión’ y ‘promover reformas económicas neoliberales que faciliten la inversión estadounidense y europea’.”
Para Suárez, la defensa de la soberanía venezolana tiene una conexión directa con la soberanía de los pueblos del Cono Sur.
“La autodeterminación de Venezuela es también la autodeterminación de Uruguay. El movimiento popular uruguayo debe profundizar la solidaridad con el pueblo y gobierno bolivariano. Nuestros proyectos de soberanía están unidos. Se debe tender redes de unidad latinoamericana que abarquen a movimientos sociales, políticos y gobiernos, en respuesta a las ilegales acciones estadounidenses.”
El referente de la Internacional Antifascista sostuvo que “Venezuela es el epicentro de la lucha antimperialista de nuestro continente” y que lo que ocurra allí tendrá consecuencias decisivas.
“Nuestros sueños de emancipación, de una segunda independencia, y de pública felicidad, dependen de lo que suceda en ese país hermano. Nuestras luchas son nacionales por su forma, pero internacionales por su contenido, y el internacionalismo es una de las huellas presentes en los genes del pueblo uruguayo.”
Consultado sobre la posibilidad de una intervención militar directa, Suárez fue categórico:
“La amenaza sin dudas puede concretarse. El genocidio en Palestina es una muestra de que están dispuestos a cometer cualquier tipo de barbarie. Lo que puede evitarlo es que EEUU vea que el costo va a ser mayor que el beneficio.”
Según explicó, la unidad del pueblo venezolano y la solidaridad latinoamericana serán factores clave para frenar una escalada bélica.
“La unidad que tiene hoy el pueblo venezolano, y la disposición a defender su patria, es fundamental. Una invasión estadounidense no va a enfrentar solamente a un ejército regular, sino que va a enfrentar a todo un pueblo en armas. Por más superioridad tecnológica que pueda tener el ejército imperialista, la determinación del pueblo a defender su tierra tiene mayor peso a la hora del desenlace.”
Finalmente, Suárez destacó la necesidad de aislar políticamente a Estados Unidos y retomar los principios de unidad continental:
“Un segundo factor importante va a ser la solidaridad y unidad latinoamericana. Aislar a EEUU en todos los terrenos y hacer valer el principio de una América Latina como Zona de Paz, va a ser determinante a la hora de evitar la guerra en Nuestra América. Vencer las campañas mediáticas y retomar los principios de la Patria Grande es una de las tareas más urgentes.”
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